Sonisphere Getafe 2011

Hace ya bastantes dias que no publico nada en el blog, y es porque desde que Milena está aquí conmigo hago cada vez más cosas pero por contraparte me queda menos tiempo para dedicarle al blog. No es una queja, todo lo contrario, es una muestra de que mi vida va cambiando a mejor.
Pero viendo que hoy he logrado encontrar algo de tiempo para el blog, he decidido contar lo que hicimos el finde pasado, y se trata del Sonisphere en Getafe. Es un festival de heavy metal que se realiza cada año al que asisten grandes bandas. El cartel se divide en dos días y los platos fuertes eran Slash el viernes y Iron Maiden el sábado, con otros grandes artistas completando la faena.
Getafe es a una hora de San Rafael así que obviamente fuimos en moto. Una ventaja de esto es que pudimos dejarla bastante cerca de la entrada del festival, y de paso aprovechamos las alforjas para llevar comida y bebida ya que allá adentro es todo muy caro y las opciones digamos que no son de nuestro entero agrado. Sin embargo como el concierto se alargaba hasta eso de las 3am tocaba coger la moto hasta Madrid y dormir donde unos amigos.
Como dato curioso, el sábado en la mañana íbamos de regreso a casa y nos topamos con un par de motos custom en la base del puerto. Se trataba de dos Vándalos que se dirigían a la concentración de Toros Bravos en Salamanca. Ellos tenían un 4×4 de coche escoba siguiéndolos y haciéndoles fotos, con lo cual al ir nosotros con ellos pues al final también hemos quedado en alguna.

Dos Vándalos detrás, Milena y yo adelante.
En cuanto al concierto, los grupos estuvieron geniales. No hay nada malo que pueda decir de la energía y de los shows que se montaron todos. El único problema real del evento es su ubicación. Se trata de un polígono industrial en Getafe donde no hay vegetación, solo tierra y asfalto. Eso influye en que la temperatura en julio sea infernal y en que el viento levante cantidades desproporcionadas de polvo que no encuentran barreras naturales. En palabras de Milena: «Parece un concierto en el desierto». Nuestro veredicto final es que los festivales son excelentes pero a este no volvemos.

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