Hace ya cuatro días que hemos vuelto a tener el límite de velocidad máxima por autovía a 120 km/h. Desde el viernes ya notaba que los coches iban más alegres en la marcha, y como yo sigo yendo a la misma velocidad de estos últimos meses, eso se traduce en que ya son más los coches que me adelantan en el camino.
La ley por la cual tuvimos el límite reducido temporalmente fue muy polémica, y ahora la gente empieza a decir cosas como por ejemplo «Si lo iban a volver a quitar, ¿Entonces para qué lo pusieron?». Qué rápido se nos olvidan las explicaciones que nos dan! Yo, manteniendome al margen de si lo considero bien o mal, recuerdo que se dijo que esa normativa era para intentar ahorrar combustible y como ahora el precio empieza a bajar entonces ya no hacía falta mantenerlo.
Lo que si debo decir es que en mi caso me ha gustado lo de tener que ir a 110 km/h por un tiempo. Aprendí que a esa velocidad llego un poco más tarde a la oficina, pero son 3 o 4 minutos que sinceramente ni te das cuenta que los has perdido. En cambio lo que si tengo más visible es la cantidad de kilómetros adicionales que me puedo hacer con un mismo depósito. Por mi parte pienso seguir conduciendo un poco más lento, y es gracias a lo que ahora he decidido tomarme como si hubiera sido una campaña educativa de la D.G.T.
2 comentarios
Totalmente de acuerdo 😉
En mi caso, que pillo mucha autovía se me hacía difícil mantener los 110… Se me comían los camiones. Pero estoy de acuerdo en que hago más kilómetros y siempre que me lo permite la autovía no voy a 110 sino a 100, jejeje.